Los robots con inteligencia artificial hace tiempo que dejaron de ser parte de las películas de ciencia ficción para convertirse en una realidad. Además, la combinación de robótica e inteligencia artificial ha conseguido dar un paso más que puede ayudar a las empresas a desarrollar la transformación digital en sus negocios.
¿Qué es la inteligencia artificial?
La inteligencia artificial, poco a poco, cambia todo, pero solo un reducido número de personas sabe realmente cómo funciona o lo que hace en realidad. Definir la inteligencia artificial no es una tarea sencilla porque se trata de una tecnología que evoluciona y experimenta continuamente. De forma sencilla, podemos decir que la inteligencia artificial consiste en que un robot o un software imite la inteligencia humana.
La capacidad de imitar la inteligencia humana supone algo que puede resultar inquietante, pero lo cierto es que no son los robots los que toman las decisiones sino nosotros a la hora de diseñarlos e integrar robots con inteligencia artificial.
Entre las técnicas de inteligencia artificial encontramos dos que es importante destacar, el aprendizaje automatizado (machine learning) y el aprendizaje profundo (deep learning) que son dos formas en las que un sistema aprende en función de cómo interactúa con su entorno físico o virtual.
¿Qué tipos de robots con inteligencia artificial existen?
Actualmente existen multitud de robots que realizan tareas en empresas, colegios y otros ámbitos. Podemos distinguir los siguientes tipos de robots con inteligencia artificial:
- Robots industriales. Son aquellos que se dedican a trabajar en líneas de montaje de la industria. Pueden realizar tareas como soldar, colocar piezas, pintar, mover objetos de un lugar a otro, etc. Se caracterizan por ser multifuncionales, ser controlados por un operador humano y ser reprogramables. La ventaja de este tipo de robots es que pueden realizar de forma sencilla tareas de esfuerzo o que supongan un riesgo para los trabajadores.
- Robots de servicios. Son robots que se utilizan, por ejemplo, en un restaurante para servir las mesas o en un hotel para recibir a los clientes. Pueden tener forma humana o ser un simple vehículo autónomo. En algunos casos, también pueden ser utilizados en actividades de rescate en zonas peligrosas, por ejemplo. También se pueden aplicar en el ámbito doméstico como mayordomos que limpian, cocinan o controlan la domótica de una vivienda.
- Robots educativos. Son robots que facilitan el aprendizaje de niños y adolescentes y que ayudan a que éstos se familiaricen con la robótica desde muy jóvenes. La robótica educativa ayuda a que los alumnos aprendan a construir y programar de forma sencilla un robot que pueda realizar una serie de tareas. Con los robots educativos se fomenta la imaginación, el trabajo en equipo, el pensamiento crítico o el espíritu emprendedor.
- Robots colaborativos. Se denominan también cobots y se caracterizan porque comparten su trabajo con personas. Para funcionar correctamente utilizan sensores que evitan accidentes y controlan todo su entorno de manera que, por ejemplo, una pinza no atrape la mano de una persona.
- Robots sociales. Estos robots se utilizan para ayudar a personas mayores, sobre todo en casos de enfermos de Alzheimer. Interactúan con ellos y monitorizan su salud. Algunos de estos robots son capaces incluso de debatir con otras personas.
¿Qué diferencia hay entre Bot, Chatbot y robot?
Es probable que hayas visto alguna vez que al entrar en una página web salta un chat en el que un asistente virtual se ofrece a ayudarte. Eso es un Bot o Chatbot. Generalmente funcionan en la nube.
Por otro lado, encontramos los robots que pueden ser máquinas físicas (por ejemplo, un brazo robótico en una fábrica de automóviles) o virtuales, son los que analizan datos y los procesan de forma automatizada (RPA). Se utilizan en diversas áreas de las empresas como las finanzas, la atención al cliente o los recursos humanos. Se trata de robots software que realizan tareas repetitivas y automáticas de forma ágil, rápida y sin errores.
Los robots con inteligencia artificial y las personas se complementan
Existe la creencia de que los robots con inteligencia artificial van eliminando poco a poco puestos de trabajo de las personas, pero lo cierto es que los robots y los humanos no deben ser excluyentes sino complementarios. Es decir, las empresas deben preguntarse cómo conseguir que los robots ayuden a las personas a hacer mejor su trabajo.
Los robots con inteligencia artificial que sean enfocados de forma correcta en las empresas pueden lograr que:
- Los trabajadores no realicen tareas de riesgo o que supongan un gran esfuerzo.
- No se cometan errores.
- Los empleados estén más satisfechos con su trabajo y no realicen tareas mecánicas.
- Mejore el ambiente laboral en la empresa y se atraiga y retenga talento.
En definitiva, en Teknei tenemos claro que se trata de cambiar nuestra forma de pensar y ver a los robots con inteligencia artificial como una ayuda para lograr nuestros objetivos.
