Según aumenta el volumen de datos, las relaciones con los clientes se vuelven más complejas, pues es más complicado gestionar la información. En la actualidad, los puntos de contacto son múltiples, por lo que es necesario un procesamiento más desarrollado.
Con una visión 360º del cliente, la información se actualiza en tiempo real y los datos se recopilan de forma unificada. Además, permite la segmentación y que se muestren ofertas relevantes y de interés, lo que aumenta las ventas y los beneficios.
Principales beneficios de una visión del cliente 360º
- Marketing efectivo: permite planificar una estrategia que obtenga mejores resultados, pues con la tecnología se procesan y analizan grandes volúmenes de datos que ofrecen información precisa y útil.
- Mejor relación con los clientes: es posible integrar los canales y aplicar las acciones más adecuadas en cada momento, lo que conduce a la fidelización de los clientes y por ende, a la rentabilidad de la empresa.
- Mayor productividad: se optimizan los procesos al tener información completa sobre los clientes, que permiten la personalización y una mejor experiencia de usuario en todo el customer journey.
Características clave de un CRM
Es un sistema de gestión de las relaciones con los clientes, que integra en una única plataforma todas las fuentes de datos, lo que facilita su manipulación y gestión. Esto es posible gracias a la tecnología, que puede optimizar todos los procesos orientados al cliente y fortalecer las relaciones con el mismo. Además, ofrece analítica avanzada, lo que es útil para tener una perspectiva más amplia y mejorar. Lo aspectos más importantes a tener en cuenta en un CRM son:
- Gestión de contactos: es necesario que se almacene de manera segura la información de los clientes y se pueda acceder de forma rápida y sencilla.
- Interacciones: hacer un seguimiento de todos los puntos de contacto es fundamental para obtener una visión de los clientes y ofrecer la mejor experiencia.
- Leads: permite identificar, calificar y hacer un seguimiento preciso de las actividades que realizan los leads, con el fin de que pasen a ser compradores.
- Automatización del flujo de trabajo: da la oportunidad de automatizar tareas repetitivas y manuales al aplicar Inteligencia Artificial y Machine Learning.
- Integración: integrar el CRM con la web, ERP, correo electrónico u otras herramientas es muy útil para la adecuada gestión.
- Analítica de los clientes: se obtiene así información estratégica para hacer previsiones de qué querrán, personalizar experiencias y tomar las decisiones más adecuadas en cada momento.
En definitiva, muchas empresas se centran ya en ofrecer la mejor experiencia del cliente, pues es necesario retenerlos para que el negocio crezca. En este contexto, la tecnología juega un papel clave, ya que ofrece herramientas útiles y necesarias para procesar, gestionar y analizar toda la información que gira en torno a los clientes.